Manifiesto de la Campaña por el cierre de los CIE's de Valencia:
"Ciudadanas y ciudadanos, organizaciones, colectivos y movimientos sociales,
concentrados en repulsa a las políticas de la Unión Europea que el jueves pasado, en
nuestro mar Mediterráneo, el mar más vigilado del planeta, produjeron, de momento,
111 personas muertas y más de 250 desaparecidas en su huída de las dictaduras y
guerras del cuerno africano,
Denunciamos:
El papel de la Unión Europea en África, que practica el expolio neocolonial e incentiva
los conflictos armados en los países de procedencia de las víctimas de la tragedia
para defender sus propios intereses económicos.
Denunciamos el lucro que suponen las migraciones para los Estados europeos,
quienes basan sus políticas en el negocio de la industria armamentística, el fomento
de empresas privadas de seguridad y la militarización de fronteras, sometiendo a
condiciones de esclavitud a millones de personas migrantes en Europa.
Denunciamos que todas las personas muertas y desaparecidas en Lampedusa,
pudiendo haber sido rescatadas, no lo fueron por aplicación persistente de las leyes
fascistas italianas que penalizan el rescate en el mar en contradicción a las
obligaciones internacionales de auxilio, salvamento marítimo y acceso a la protección
internacional (asilo).
Denunciamos que lo sucedido en Lampedusa es un práctica frecuente en la Frontera
Sur del mar Mediterráneo.
Denunciamos que las migraciones forzosas y el exilio son consecuencia de un orden
social y político injusto y globalizado al servicio de un sistema capitalista basado en la
explotación, la desigualdad y el sometimiento de los pueblos.
Denunciamos el genocidio, las fronteras asesinas y la estrategia de la Unión Europea
que, preocupada únicamente porque "la tragedia no se produzca en su frontera o
jurisdicción", compra a los países de origen de migrantes para que sean estos quienes
gestionen la muerte, la ignomia y la vergüenza de castigar a quien huye del hambre,
de la guerra y del expolio.
Denunciamos que los partidos políticos mayoritarios actúan de forma demagógica y
manipuladora, distorsionando la realidad de la migración con fines electoralistas y
provocando el conflicto social con la ayuda de los medios de comunicación afines.
Las víctimas de Lampedusa no eran "ilegales" ni "sin papeles". Eran seres humanos.
Denunciamos que la Unión Europea es responsable de más de 20.000 muertes en las
últimas dos décadas y millares de personas desaparecidas, siendo incalculbale el
número de víctimas del cementerio mediterráneo.
Europa es culpable de arrojar a miles de personas a travesías cada vez más
peligrosas que obligan a quienes huyen a depender de redes de tráfico y trata de
seres humanos.
Si la muerte de miles de personas despierta nuestra conciencia, ¿A qué esperamos?
¿Qué vamos a hacer?
Además denunciamos que Europa y el Estado Español en el marco de las regresivas
políticas europeas, ejerce una constante represión de las personas migrantes,
practicando identificaciones sistemáticas y redadas policiales en forma de razzias, así
como el encierro y maltrato en los Centros de Internamiento de Extranjeros (CIE) y las
expulsiones forzadas en los ya conocidos como "vuelos de la vergüenza". Todas estas
acciones intoxican nuestra sociedad y propagan el racismo y la xenofobia.
Denunciamos el desmantelamiento del Estado de bienestar, que en vez de asegurar
los derechos básicos como la sanidad, la educación, la justicia y la libertad de todas
las personas invierte nuestros impuestos en pagar controles, dispositivos y fronteras
que asesinan a nuestras hermanas y hermanos.
Y por todo ello, exigimos:
La derogación inmediata y urgente de la Directiva Europea de Retorno, “Directiva de la
Vergüenza”. La derogación de las Leyes de Extranjería y de todos los instrumentos
jurídicos que impiden el legítimo derecho a migrar y el derecho a encontrar refugio en
un territorio seguro.
Exigimos el estricto cumplimiento de la Declaración Universal de Derechos Humanos y
por lo tanto el cese de la represión y el racismo, así como la identificación de los
culpables, la depuración de responsabilidades y la reparación a las víctimas.
El cierre de todos los Centros de Internamiento para Extranjeros (CIE) y con ello el
desmantelamiento de todos los dispositivos que impiden a las personas salir de sus
países, llegar, y vivir en otros. ¡Basta de vallas, visados, control de fronteras y muertes
en el mar!
Exigimos a Italia, la Unión Europea y al Estado Español que firme y ratifique la
Convención Internacional para los Derechos de los Trabajadores Migrantes y sus
Familias.
"El drama de Lampedusa no es el fruto de una fatalidad. No se debe ni a ávidos
traficantes ni a pescadores indiferentes. Los muertos de Lampedusa, como los de ayer
y de mañana, son las víctimas de una Europa encerrada en una lógica seguridad, una
Europa que ha renunciado a los valores que pretende defender. Una Europa asesina".
La ciudadanía, las organizaciones y los movimientos presentes seguiremos luchando
por el fin del genocidio migratorio, por el respeto a los derechos humanos, por la
libertad de todos los seres humanos y por la justicia social.
POR EL FIN DEL GENOCIDIO MIGRATORIO
NO MÁS MUERTES EN EL MEDITERRÁNEO
¡NINGÚN SER HUMANO ES ILEGAL!"