Mohamed Benhalima es un ex militar y activista argelino que, tras trabajar como conductor de un general del ejército, denunció la corrupción de los altos mandos de la
institución militar de su país: los abusos de poder por parte de los generales;
el uso de una institución del Estado al servicio de los generales y sus
familias; la ampliación de la definición del delito de terrorismo para
perseguir la disidencia política; y la extrema represión de las autoridades.
Además, Benhalima fue una de las caras visibles de las protestas del movimiento
Hirak, que pretenden un cambio democrático en el país que acabe con el gobierno
militar y dé paso a un gobierno civil y a un Estado de Derecho. En 2019, tras
ser informado de que su nombre aparecía en una lista de personas buscadas por
su activismo, huyó a España y posteriormente a Francia para solicitar
protección internacional. Entró en contacto con Amnistía Internacional, que
documentó su caso y el de otros activistas de su mismo perfil que habían sido
privados de libertad injustamente después de ser expulsados a Argelia o habían
sido detenidos allí mismo por las autoridades y continuó denunciando desde
España al gobierno argelino.
Por otro lado, Mohamed
Abdellah es un ex militar y activista argelino que pidió protección
internacional en España tras denunciar la corrupción y los crímenes de los
responsables militares de Argelia. Destinado en Tébessa, en la frontera entre
Argelia y Túnez, fue testigo de cómo el ejército controlaba el contrabando.
Huyó del país en 2018 y contactó con Benhalima cuando este llegó a España un
año más tarde, convirtiéndose entonces en compañeros de lucha y uniendo sus
esfuerzos para continuar desde España con la denuncia de las vulneraciones de
derechos que ocurrían en su país de origen y de las que habían sido testigos
antes de su salida. Tanto Abdellah como Benhalima tenían una cuenta en Facebook
y un canal de Youtoube con miles de seguidores desde donde denunciaban la corrupción
del ejército, tanto desde Argelia como posteriormente desde España. El
Ministerio del Interior denegó la solicitud de asilo de Mohamed Abdellah, le
abrió un procedimiento de expulsión en base al artículo 54.1.a) LOEX y fue
privado de libertad en el CIE de Zona Franca (Barcelona), desde donde fue
expulsado a Argelia el 21 de agosto de 2021 a pesar de las advertencias del
riesgo que corría de ser detenido y torturado. Argelia le acusa de revelación
de secretos, transgresión de sus obligaciones castrenses, insultar a las
Fuerzas Armadas y al presidente de la República y de pertenencia a organización
terrorista. Cuatro meses más tarde, en noviembre de 2021, su defensa revelaba
que Abdellah había sufrido torturas físicas y psicológicas en la prisión
militar.
Cuando Abdellah fue
expulsado a Argelia, Benhalima salió de España e intentó pedir asilo en
Francia, convencido de que su solicitud también sería denegada y acabaría
corriendo la misma suerte que su compañero. Sin embargo, en Francia se le
comunicó que la solicitud realizada en España no había sido resuelta y se vio
obligado a volver. Finalmente, España denegó su
solicitud de asilo y casi tres años más tarde, Benhalima fue detenido he
internado en el CIE de Zapadores (València) con una orden de expulsión en base
al artículo 54.1.a) LOEX, es decir, constituir un riesgo para la seguridad
nacional o para la relación de España con otros países, aunque no se aportó
ninguna prueba al respecto. Volvió a solicitar protección internacional y esta
le volvió a ser denegada. Desde el CIE de València y pese a las advertencias de
organizaciones en defensa de los derechos humanos y el derecho de asilo como
Amnistía Internacional y CEAR PV, colectivos de abogados que defendían a
Benhalima como la Red Jurídica, y activistas y movimientos sociales como la
Campaña CIEsNO, fue expulsado a Argelia el 24 de marzo de 2022 donde, al igual
que Abdellah, fue inmediatamente detenido y encerrado en una prisión militar.
La expulsión de
Mohamed Benhalima se realizó de forma expeditiva y con numerosas
irregularidades. Según el Defensor del Pueblo, el 24 de marzo de 2022 se
notificó la denegación de la solicitud de reexamen de la OAR a las 17:35h, la
orden de expulsión a las 17:38h, y la ejecución de esta a las 17:40h,
materializándose a las 19:45h. Durante todo este tiempo, a Mohamed Benhalima se
le retiró el teléfono y se le impidió que utilizara el de otros internos para
avisar a sus abogados de dichas notificaciones, vulnerando de hecho su derecho
a la defensa y asistencia letrada. La deportación se realizó en un avión del
Ministerio del Interior desde el aeropuerto de València, a pesar de que las
deportaciones a Argelia siempre se realizan por vía marítima y de que no se
realizan deportaciones por vía aérea a lugar alguno desde el aeropuerto de
València. Asimismo cabe destacar que en dicho dispositivo del 24 de marzo se
expulsó ilegalmente a un ciudadano argelino cuya devolución había sido
paralizada por la Audiencia Nacional.
Enlace al comunicado Disidencia deportada |
En cualquier caso,
tanto con la expulsión de Abdellah (Barcelona, 2021) como con la de Benhalima
(València, 2022), España ha incumplido sus obligaciones internacionales
vulnerando el principio de no devolución, que debería garantizar que ninguna
persona que tenga un temor fundado de sufrir tratos inhumanos o degradantes en
su país de origen o residencia será devuelta al mismo. La persecución que
sufrían estaba ampliamente documentada por diversas organizaciones y
constituían casos de persecución por razones políticas o por pertenencia a un
grupo social determinado, tal y como señaló ACNUR.
En la actualidad,
ambos, Mohamed Abdellah y Mohamed Benhalima, se encuentran privados de libertad
en una prisión militar próxima a la capital argelina y se enfrentan a numerosos
procedimientos judiciales, tanto en tribunales penales ordinarios como en
tribunales militares. Ambos han sido ya condenados a numerosos años de prisión
por algunos de estos procedimientos y cabe destacar que, además, Mohamed Benhalima
ha sido condenado en ausencia a la pena de muerte por un tribunal militar, que
le ha declarado culpable de los delitos de conspiración y deserción del
ejército.
En general, la
disidencia política señala que la situación de los Derechos Humanos en Argelia
se ha deteriorado drásticamente en los últimos tres años y el movimiento
popular Hirak, que constituye la voluntad del pueblo por un cambio radical en
el sistema vigente y la instalación en el país de una verdadera democracia con
un gobierno civil y no militar, ha sido violentamente reprimido y las
detenciones de activistas, militantes y periodistas han seguido aumentando. La
diáspora argelina denuncia que como militantes por los derechos humanos y
activistas políticos sufren enormes presiones, hasta el punto de no poder
volver a Argelia en condiciones de seguridad, sin riesgo de ser detenidos. De
hecho, hace algunos meses, un argelino residente en Canadá fue detenido en el
aeropuerto de Argel y encarcelado por haber participado en manifestaciones
pacíficas en Montreal. Actualmente, todas las personas detenidas por su
pertenencia al movimiento pacífico Hirak lo son por sus opiniones políticas,
que han manifestado en las redes sociales o de manera pacífica en las calles.
El régimen actual intenta por todos los medios buscar alegaciones infundadas
contra los activistas para detenerlos y encarcelarlos, y les presiona con
violencia y amenazas para que delaten a otros militantes.
Más información:
Comunicado de la Campaña Estatal por el cierre de los CIE y el fin de las deportaciones: Disidencia deportada
Aparición en medios a raíz de la nota de prensa de CIEsNO
- CIEsNO pide a Interior que paralice la expulsión de un activista argelino que denunció la corrupción de su país
- La Campaña CIEsNO – València exige a Interior la puesta en libertad de un activista argelino
- La Campaña CIEsNO exige a Interior que no deporte al activista argelino Benhalima
Otras apariciones en medios
- Una concentració a València exigeix que no es deporte l’activista Mohamed Benhalima
- Els casos de Mohamed Benhalima i Abderrahim, deportats a Algèria
- Ocho eurodiputades exigen a Grande Marlaska explicaciones por la deportación de Benhalima a Argelia
- Abderrahim i el dret de les persones migrants
Artículos
de Red Jurídica
Enlaces de Amnistía Internacional
- España: Anulen la expulsión de Mohamed Benhalima a Argelia, donde puede ser torturado
- Argelia: España hace dejación de sus obligaciones Internacionales al devolver a un denunciante de irregularidades argelino
- España: el Gobierno debe presionar para que se anule la condena a muerte de un argelino deportado por las autoridades españolas
Otros artículos de interés
- La vida destrozada de un militar entregado al régimen de Argelia por el Gobierno de España
- Otra infamia de Marlaska
- Mohamed Benhalima: historia del argelino condenado a muerte entregado por España